En un futbol actual que es cada vez más especializado, los futbolistas deben destacar al menos en dos posiciones para ser útiles para sus técnicos en cualquier tipo de sistema. Sin embargo: ¿te imaginas a alguien que fuera buen defensa, delantero y árbitro?
Hoy en día, sería imposible que esto ocurriera. Hace exactamente 103 años sucedió en una edición de la Copa América con el legendario Joao de María. Este personaje fungió los tres roles, hablándose además de que fungió un buen papel en los tres.
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Para empezar, es importante resaltar que eso difícilmente sucedería con el nivel de profesionalismo actual. Hace 100 años el deporte era diferente, permitiéndose este tipo de anomalías. Igualmente, trasladarse a estos torneos no estaba al alcance de cualquiera.
De María era uno de los futbolistas más valorados por Brasil en esa época, encontrándole valía en ambas posiciones. Fue una pieza importante, ayudándole a su conjunto a terminar en la tercera posición de la competición, solo por detrás de Uruguay y Argentina.
El partido más importante para Joao de María en la Copa América
El trabajo más desafiante para el brasileño fue dirigir el partido de fase de grupos entre Chile y Argentina, el cual finalizó 1-1. Ahí resultó muy extraño ver a un futbolista dirigir las acciones como árbitro. Sin embargo, su actuación no fue extremamente señalada.
Por lógicos motivos, no existen registros en video de aquel compromiso, por lo cual es una curiosa anécdota que es comentada de generación en generación pero de la cual existen contados testigos.