Brasil siempre se ha caracterizado por tener futbolistas expertos en el lateral izquierdo. El más recordado de ellos es Roberto Carlos, a este se le suman Marcelo y en la actualidad Renan Lodi junto a Alex Sandro. Sin embargo, en la tierra de los carrileros, los uruguayos comienzan a hacerse un lugar en tierras norteñas y en una posición que no es para cualquiera. Ya jugadores como Lugano conquistaron un sector endeble de los brasileños y en el último tiempo Giorgian De Arrascaeta se ha vuelto el “10” del Flamengo y el mejor del fútbol verdeamarelo.
Brasil se aprovecha de ser limítrofe de Uruguay e invierte por un bajo costo en nuestro territorio. Sucedió con David Terans para que el mismo dejara Peñarol, aportara en la eliminación de su ex equipo y se coronara campeón de la Copa Sudamericana. Un “10” que vestía la “80” y que con una buena oferta económica potenció a un rival directo.
Palmeiras siguió el mismo camino y tras dos títulos consecutivos, seguramente lo vuelva a intentar la próxima temporada: el de conseguir un nuevo lateral izquierdo.
¿Serán los laterales izquierdos de Uruguay el amuleto del Palmeiras?
En toda su historia, 21 uruguayos han vestido la camiseta del verdao. Sin embargo, desde Segundo Villadonga que el Palmeiras no tenía futbolistas tan reconocidos de nuestro país y vitales en su escuadra. El charrúa es el quinto extranjero con más partidos en la historia del club y fue parte del elenco del Palestra entre 1924 y 1946. Tanto Matías Viña, como Joaquín Piquerez en tan poco tiempo, han sido campeones de Libertadores y claves en su posición.
En 2020 el Palmeiras apostó por Matías Viña en el lateral zurdo y se llevó al mejor en su posición en el campeonato uruguayo a cambio de 4.5 Millones de euros. Tal es así, que al ex Nacional no le costó nada meterse en el equipo: sumó una Copa Libertadores y una Copa de Brasil. Dejó un total de 70 partidos, con cinco goles y 10 asistencias. Llegó a la Selección Uruguaya y posteriormente la Roma se fijó en él. Dejó 13 Millones de euros en su transferencia.
Por otra parte, se encuentra Joaquín Piquerez, jugador que ha ido de menos a más en un abrir y cerrar de ojos. Pasó de no ser tenido en cuenta en Defensor Sporting a que Fossati le diera la oportunidad en River, le cambio la vida. Su excelente rendimiento y su nueva faceta como lateral y no como volante, lo hicieron crecer exponencialmente. Se convirtió en el titular en su sector y se ganó el llamado a Peñarol. Además, consiguió ganarse un lugar en el elenco ‘mirasol' y hacer una meritoria Copa Sudamericana. Sus grandes rendimientos llevaron a que el Palmeiras apostara por la misma formula, esta vez el carrilero llegó desde la vereda de enfrente y tampoco desentonó. Pasó de tener pocos minutos y adaptarse, a jugar la final de la Copa Libertadores y levantar el centro ante el Flamengo.
¿Seguirá el Palmeiras con la misma cábala de traer un uruguayo el año que viene?