Muchos jugadores sueñan con triunfar en un club, quedar en la historia y ser recordado por mucho tiempo allí. Otros, prefieren andar por el mundo detrás de la caprichosa para ser felices jugando y viviendo de lo que aman, el fútbol. Nicolás Abot, argentino de 38 años, es uno de sos jugadores que prefiere girar por el mundo detrás de la pelota. A sus 22 años comenzó su camino de ir país por país, continente por continente. En el año 2020, dialogó con Balón Latino sobre cómo es su vida siendo el “Mochilero del fútbol” y, cómo motivo de festejo porque salió máximo goleador y jugador del año en su equipo número 35 en toda su carrera, recordamos su entrevista con este medio.
Los equipos en dónde jugó Nicolás Abot son los siguiente: Racing de General La Madrid (1996-2001), Deportivo Sarmiento de Coronel Suárez (2002), Independiente de Pueblo San José (2003), Deportivo Barracas de La Madrid (2003), Olimpo (2004-07), Pérez Zeledón de Costa Rica (2007), Sportivo Italiano (2008), Sporting (2008-09), Zamora de Venezuela (2009-10), Costa Cálida de España (2010), Rampla Juniors de Uruguay (2011), Real Tolve de Italia (2011), Pacífico de Cabildo (2012), Laferrere (2012), Ferro de Olavarría (2012), Blooming de Bolivia (2013), Jurmala de Letonia (2014), Persebaya de Indonesia (2015), Salento Leverano de Italia (2015), Tiger FC de Australia (2016), Tasman United de Nueva Zelanda (2016-17), Victoria Wanderers de Malta (2017), Tricase de Italia (2017), Polisportiva Monte Cimine de Italia (2018), Pascoe Vale de Australia (2018), Alassio FC de Italia (2018), Cooma Tigers de Australia (2019), Krabi Football Club de Tailandia (2019), Roccasecca de Italia (2020), Opountios Martinou de Grecia (2020), Panardinaikos de Grecia (2021), Bankhai United de Tailandia (2021), Asd Cotronei Caccuri de Italia (2022), Gungahlin United de Australia (2022) y Queanbeyan City FC de Australia (2023).
Entrevista a Nicolás Abota, el “Mochilero del fútbol”
P: ¿Cómo llega el fútbol a tu vida? ¿Cómo fueron tus primeros pasos?
R: Desde que nací hasta los siete viví en La Colina, que es un pueblo del Partido General La Madrid (Buenos Aires), donde mis viejos tenían una cancha de fútbol “7”. Ahí fue donde arranqué. Mi primer equipo fue Racing de General La Madrid donde estuve desde los siete años hasta los 15. Tuve la suerte de tener como entrenador a Abelardo Carabelli, campeón mundial con las juveniles de Argentina en 1979, que me enseñó muchísimo. Luego, tuve un par de años a Alexis Cortés en Coronel Suárez que me marcaron para mi carrera. A los 15 años me voy a jugar a Deportivo Sarmiento de Coronel Suárez. Luego comenzaron los viajes.
P: En el año 2004 llegas a Olimpo de Bahía Blanca. ¿Cómo fue tu experiencia en los tres años que estuviste allí?
R: Fue unas de las mejores experiencias porque empecé a tener roce con el fútbol profesional, con jugadores de nombre y con bastante aprendizaje. Aunque siempre quedó la espina de no haber podido jugar por más de haber formado parte del plantel profesional por dos años.
P: Con 22 años comenzas tu viaje por el mundo detrás de la caprichosa. Tu primer destino fue Costa Rica, ¿con qué estilo de vida te topaste?
R: Me encontré con un estilo de vida espectacular porque es muy tranquilo, imagínate que la policía no tiene armas. Un país caribeño donde la vida que llevan es hermosa. Me costó un poco adaptarme porque hacía muchísimo calor, me habían llevado los dirigentes y por eso el entrenador me ponía de suplente. No fue la mejor experiencia, pero para dar el primer paso afuera, estuvo bueno.
P: Después de un breve paso por el fútbol argentino nuevamente, te llega la posibilidad de fichar por el Zamora de Venezuela en el 2009 donde jugaste la Copa Sudamericana. ¿La consideras tu mejor experiencia dentro de todos los equipos donde jugaste?
R: Fue una de las mejores. Porque era un equipo de primera, por haber cumplido el sueño de jugar una copa internacional. La verdad que es un club hermoso, fue creciendo y saliendo campeón muchas veces. Si, puedo decir que fue el lugar en donde más cómodo me sentí y hasta ahora en mi carrera, haber jugado la Copa Sudamericana, es lo máximo.
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P: En 2010 emigras por primera vez al viejo continente para jugar en el Costa Cálida del ascenso español. ¿Te costó la adaptación al estilo de juego?
R: La verdad que me sentí muy cómodo, soy un delantero que le gusta moverse mucho en el frente de ataque y no jugar al pelotazo, por lo que en el fútbol español me sentí cómodo y a gusto. En España se juega un fútbol muy lindo con la pelota al ras del piso.
P: Real Tolve, Salento Leverano, Tricase, Polisportiva Monte Cimine, Alassio y, por último Roccasecca (luego se agregó Asd Cotronei Caccuri en 2022) son todos los clubes italianos en tu curriculum. ¿Cómo fue tu vida en Italia? ¿Qué diferencias notaste en entre los norteños y los sureños?
R: En momentos donde no tengo equipos, intento ir a Italia porque tengo el pasaporte italiano y es fácil conseguir equipo. La vida en Italia es hermosa, pero no comparto muchos pensamientos con la gente en relación a que quieren demostrar más de lo que son. Obviamente los sureños son mucho más afectivos que los del norte, por lo que me quedo más con el sur. Más que nada la zona de Napoli donde tengo muchos amigos y la verdad que son como nosotros.
P: A través del fútbol conociste países por todos los continentes casi. ¿Qué cultura te sorprendió más?
R: Tengo un mix de culturas conocidas. Indonesia, Tailandia, son culturas totalmente diferentes a la nuestra, pero en Letonia también, pese a ser parte de Europa, tiene una cultura muy rara. Pienso que la asiática es la más diferente, pero me encanta.
P: En el año 2014 arribaste al Jurmala de Letonia, un club que desapareció y al año siguiente surgió con otro nombre. Un equipo corrupto. ¿Qué podrías contar sobre esa experiencia?
R: Fue una experiencia mala porque habíamos llegado con la ilusión de hacer las cosas bien. Es un país chico, pero habíamos ido siete argentinos. Saliendo campeón o subcampeón, tenes la chance de jugar tanto la Champions League como la Europa League, por lo que íbamos con ese sueño. Apostaban en los partidos, un poco mafiosos. Si bien, siempre cuento esa historia, es una manchita que no me gusta porque yo amo el deporte y a ellos no les importaba nada, no nos pagaban el sueldo. Una mala experiencia que quedó en el pasado.
P: Tiger FC de Australia es el equipo donde más goles convertiste, un total de 40 goles. ¿Fue tu mejor momento a nivel futbolístico?
R: Tuve la suerte de que me fue bien en las dos temporadas y media que estuve, salimos campeones. Si, se puede decir que el equipo en donde mejor me sentí. También me dieron bastante importancia en ese sentido entonces cuando uno tiene la confianza, rinde dentro de la cancha porque, al fin y al cabo, en lo futbolístico el 80% es mental. Si estás mentalmente bien, haces la diferencia.
P: La pandemia del COVID-19 te agarró en el Roccasecca de Italia, donde la situación no fue muy buena. ¿Cómo viviste ese momento?
R: Me agarró recién llegado, estaba hace un mes por lo que pude jugar tres partidos nomás. Italia estaba muy complicado en ese momento, pero tuve la suerte de estar en un pueblito muy chiquito en la montaña, por lo que pudo cerrar las puertas y no hubo casi casos. Estuve encerrado 95 días con Nahuel, un amigo mío que también se vino a jugar a Grecia conmigo.
P: Cumplís rol Jugador-Manager. ¿Cómo te contactas o te contactan los equipos?
R: Jugador, manager, preparador físico, hago todo. Hoy, por suerte, con las redes sociales uno puede llegar a estar en contacto con mucha gente del deporte y viceversa. Uno puede demostrar su actualidad y así estar en contacto, gracias a Dios en el fútbol tengo muchos contactos y muchas amistades que te pasan uno, te piden otro. Qué cuando le piden un delantero, se acuerdan de mí y eso te va abriendo puertas.
Palabras de admiración y respeto para el “Loco” Abreu
Una vez que firmó con el Opountios Martinou de Grecia alcanzó la cifra de 30 equipos, superando al histórico futbolista uruguayo. En relación a ese logro conseguido, Nicolás Abot declaró lo siguiente: “Lo han dicho varios periodistas, pero no tienen ni para comparar. Un ídolo que jugó un Mundial, que jugó en todos lados y admirable porque sigue jugando a los 43 años. Yo juego al fútbol porque me hace feliz y es lo que amo, obviamente voy a seguir jugando hasta que me den las cañas. Espero que sean muchos años más, así que espero pasarlo por muchos equipos. Obviamente, mi carrera no es ni el 10% de la de él, pero es un lindo juego”.
Y cumplió con su palabra, ya que después de fichar por su equipo número 30, pasó por Panardinaikos de Grecia, Bankhai United de Tailandia, Asd Cotronei Caccuri de Italia, Gungahlin United de Australia y Queanbeyan City FC de Australia, dónde está actualmente. Esta temporada ganó la Bota de Oro (21 goles en 23 partidos), el Balón de Oro y formó parte del equipo del año. Estrafalario el nivel de Nicolás Abot a sus 38 años y luego de estar ocho meses sin jugar por una operación en el tendón de Aquiles.
Próximo objetivo en su carrera: Jugar en África
“El objetivo de África siempre está. Lo difícil son los contactos para ir. Pero bueno, espero tener la oportunidad de hacer el golcito en África que tanto deseo para terminar la carrera con un gol en cada continente, sentenció Nicolás Abot. Todavía tiene nafta para seguir entonando el grito sagrado con toda el alma, tal como lo expresa en sus redes sociales.
Por otro lado, el “Mochilero del fútbol” les dejó un consejo para quiénes deseen vivir la misma experiencia que él: “Para los que quieren viajar y vivir del fútbol, decirles que no es tan fácil. El consejo que les doy a los que quieran jugar al fútbol o hacer lo que sea, es que luchen por sus sueños. El fútbol, a diferencia de otras cosas, tiene una vida útil y que hay que hacerlo cuando uno es joven. Hay otros sueños que se pueden cumplir después, así que mi consejo sería que tanto en el fútbol como en la vida, luchen por sus sueños”.
