La situación social y política en Colombia no es alentadora: la violencia se ha volcado a las calles y la injusticia está a flor de piel. El panorama duele y retrata a un país que se desangra. No obstante, en las calles también abundan los manifestantes pacíficos y las personas que luchan legítimamente por sus derechos. Por las calles se ve el surgimiento de espacios de esperanza y encuentro. Espacios que pueden encontrarse en iniciativas como la de La Paz FC, un club de fútbol que se esfuerza por la reconciliación en Colombia.
Fundarse desde el encuentro
La firma del Acuerdo de Paz en 2016 trajo consigo múltiples cambios en el panorama de Colombia. Alejándonos de la pregunta por la totalidad de su cumplimiento, la apertura al proceso de paz le dio paso a diversos proyectos e iniciativas encaminadas a la construcción de un mejor país. En este marco, en 2017 se fundó el equipo La Paz FC. El club con sede en Bogotá nació bajo la premisa de la reconciliación y la inclusión. Sus filas están formadas por jóvenes que se han visto envueltos en el oscuro contexto de la violencia.
La Paz adoptó un proyecto deportivo en el que se le da la oportunidad a jugadores y jugadoras provenientes de diferentes zonas del país. Particularmente, se ha construido el club a partir del encuentro entre personas que fueron víctimas del conflicto armado, y personas que se comprometieron con dejar las armas e involucrarse en la reincorporación.
Sueños de profesionalismo
Si bien el club surgió como un miembro del fútbol aficionado, La Paz ha estado realizando las gestiones para poder participar del balompié profesional de Colombia. Desde sus inicios, la administración del equipo ha estado en contacto con la Dimayor, buscando cumplir con los requisitos necesarios para afiliarse. Antes de la pandemia, la esperanza era ingresar al profesionalismo en 2021. Esto no ocurrió, aunque las gestiones no se detienen, menos con la posibilidad de una tercera división en el país.
Espacios de esperanza: reflexión
Caer en la desesperanza es fácil viendo tantas situaciones atroces todos los días. Sin embargo, conservar la esperanza y alimentarla es posible. En Colombia, los espacios para reconciliar abundan, las iniciativas para construir paz están siendo generadas y trabajadas: lo que debemos hacer es buscarlas y comprometernos. Quizá ese sea el mensaje que deba prevalecer ante el panorama actual: crear, encontrar y acudir a espacios, como el club de fútbol La Paz, es la oportunidad que tenemos para encontrar esperanza en Colombia.