En el año 2013, en un sitio llamado “AguanteChe.com” se escribió un artículo titulado “Gente que No”. El mismo contaba la historia de un joven argentino que la descocía con la caprichosa. La llevaba atada a sus pies y qué muchos, los más grandes, lo veían jugar y recordaban a jugadores como Enzo Francescoli o el histórico, Leopoldo Luque. La dejaba chiquita (expresión que se usa en Argentina para decir que un futbolista juega muy bien, casi de forma excelente al fútbol) este joven futbolista de las inferiores de Chacarita Juniors que un día, por obra del destino, terminó jugando junto a Sergio Agüero, Carlos Tévez y Pablo Zabaleta en el Manchester City. Estamos hablando de Ezequiel D´Angelo, el enganche que hoy brilla en San Telmo de la Primera Nacional y que maravilló al entrenador italiano, Roberto Mancini.
Su primer entrenamiento con Manchester City
Ezequiel fue a correr en su primera práctica con los ciudadanos y, en sus primeros momentos, tuvo en una de sus primeras anécdotas con Pablo Zabaleta. “Justo él volvía de las vacaciones, nos hicieron correr y ahí me preguntó de dónde venía y de qué jugaba. Yo le contesté que de enganche y que llegaba de Chacarita. Y tras eso lo miré y le pregunté: “¿Y vos de qué jugas?”. Ahí me miró raro y le dije “No, ya sé, te estoy cargando, ja”, comentó en una entrevista con Diario Olé.
Lo que muchos se deben estar preguntando, tras ver con quienes entrenó y que seguramente sea la primera vez que vean el nombre de Ezequiel D´Angelo vinculado al Manchester City es: ¿Cómo llegó al club?. “Se dio porque al grupo empresario que me manejaba, en ese momento, le llegó una invitación formal por parte del club para que vaya a prueba una semana. Justo el representante de Roberto Mancini estaba en Argentina, por suerte me vio en Chacarita y le gustó mi manera de jugar”, explicó el propio D`Angelo.
Ezequiel D´Angelo y la “Gente que no”
Sólo cinco partidos había jugado como profesional con la camiseta de Chacharita Juniors previo al descenso del club a la Primera Nacional. En dicha categoría, había alternado titularidades y suplencias, pero justo en ese impasse, apareció la opción para irse a probar al Manchester City. Estuvo durante un mes, jugó amistosos, la rompió oficialmente con el equipo de Reserva del City con dos goles en tres encuentros. Cuando parecía que se quedaba en el club, le dijeron que no. “Querían jugadores más rudos”, fue la excusa. Vaya idiosincrasia.
Su sueño de jugar en Europa no terminó allí. Volvió a tener la oportunidad de una gira por Inglaterra, después voló a Italia para jugar en el Genoa y hasta tuvo una prueba con el Varese del fútbol de Malta. En todo ese camino, lleno de ilusión, felicidad y buenos momentos para Ezequiel D´Angelo, se topó con la “Gente que no” hay que encontrarse.
En todos los clubes que jugó, la dejó muy chiquita (expresión que se usa en Argentina para decir que un futbolista juega muy bien, casi de forma excelente al fútbol) . Tal cómo lo describen en el libro “Tapones de Fierro” de Agustín Lucas, Ezequiel “tejía jugadas que abrigaban el área, ese pantano frío habitado por el raye de los porteros, el delirio de los nueve y la sinrazón de los defensores”.
Una historia de fútbol y Rock and Roll
Tras todas las malas, finalmente llegaron las buenas. Ezequiel D´Angelo encontró en San Telmo de la Primera Nacional (Segunda División de Argentina) su lugar en el mundo y hoy sigue tratando como los mejores a la caprichosa. Inspirados en su historia, la ex banda de Rock Nacional “Callejeros” escribió un tema sobre su historia, ya que fueron compañeros en la etapa de Ezequiel en Comunicaciones.
Una de las frases más importantes de la canción “Rocanroles Sin Destino” dice: “la revancha de todos aquellos que la pelearon al lado, de cerca o muy lejos y no pudieron reír sin llorar”. Barras que describen al pie del cañón la historia de Ezequiel D´Angelo, el enganche de San Telmo que jugó en el Manchester City. Actualmente, se encuentra estudiando la carrera de Contador Público y sigue defendiendo los colores de su querido Telmo.
