El partido definitorio entre Sevilla y Roma por Europa League traerá mucha emoción al campo de juego. Pero también significará el fin obligatorio de una marca que posee cada uno de los equipos.
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Sin lugar a dudas que la final de la Europa League entre el Sevilla y Roma, a disputarse en el Puskás Aréna de Budapest será un duelo más que apasionante. Porque, para empezar, se enfrentan dos equipos grandes en sus países. Pero también un equipo acostumbrado a definir este trofeo y otro que tampoco pierde. ¿Entonces?
Entonces alguno de los dos dejará en el camino una racha increíble. Para empezar, vale la pena recordar que el Sevilla es el más ganador de este trofeo en la historia. Con 6 copas levantadas, se diferencia de sus perseguidores que apenas tienen tres. Pero lo destacable es que las seis veces que llegó a una final, ganó la copa. Es decir, nunca perdió en esta instancia. Una récord bastante difícil de conseguir.
Por el lado de la Roma, tenemos al conjunto italiano que solo jugó una final de esta copa (en 1991) pero su foco está en su entrenador: José Mourinho. El DT portugués disputó cinco finales continentales y las ganó todas. Dos Champions League, dos Europa League y una Europa Conference League. Una verdadera brutalidad.
Cuando el final del partido esté concretado, uno de los dos equipos continuará con su terrible racha mientras que el otro romperá una gran marca.
El efecto Mou en la Roma ha sido sorprendente a tal punto que llevó a su equipo a una segunda final continental consecutiva.
En tanto el Sevilla tiene una temporada muy mala, pero en esta competencia ha dado sobradas muestras de ser un rival verdaderamente difícil dejando en el camino a rivales como el Manchester United o a la Juventus la última semana.