Muchas veces las historias que deben contarse sobre el fútbol, ni siquiera ocurren en las canchas, sino en realidades donde los golpes son más severos que el recibir un gol o perder un partido. En las redes sociales muchos usuarios y algunos medios del Perú propagaron un nombre: el de Beckham Romario. Este muchacho tenía 18 años y falleció en diciembre pasado en Apurímac. Y en Balón Latino quisimos platicar un poco de su historia.
Tensa situación social y política en Perú
Desde principios de año en este espacio se le ha compartido a los lectores cómo en Perú hay un conflicto social delicado tras diferentes situaciones ocurridas en el sector político. Hoy día la ciudadanía peruana no reconoce a quien quedó a cargo de la nación y exigieron votaciones para este mismo año, mientras los dirigentes nacionales indicaron que sería hasta el 2024. Por ello el país se enfrascó en una serie de protestas que las autoridades repelieron con el uso de fuerza mayor… incluyendo disparos con armas letales y no letales.
Y es ahí cuando entra la historia de Beckham Romario Quispe Garfias.
Beckham Romario: entrenador a los 18 años
Como millones de personas alrededor del mundo, el fútbol era la pasión de este joven peruano. Jugaba y entrenaba a un equipo de la zona, actividad con la que le ayudaba a su familia para el sustento diario. El equipo con el que jugaba se llama Leones Rojos y creó su propia academia para niños y adolescentes con la intención de ayudar a quienes acudieran como participantes del proyecto.
Sus mismos nombres ya lo tenían destinado a una vida que no podía negarse. Pero tras los conflictos ocurridos en Perú, el muchacho participó de las protestas en Andahuaylas contra la presidenta Dina Boluarte. Pero por desgracia para él y su familia, recibió un impacto de bala y dos meses después solamente se ha confirmado lo que ya se sabía… que fue asesinado por la fuerza pública que “trata de disolver” el descontento de la población del Perú.
Por la situación económica le era complicado sostener el proyecto de la academia, pero con eso quiso apoyar su casa y los planes eran entrar a la universidad para ser médico. Y yéndose todavía más allá en los grandes sueños… pensar en hacer una carrera como futbolista.
El futbolista que no debe ser olvidado
En los estadios del mundo se corean los nombres de los grandes hombres y mujeres que destacan por su habilidad dentro del fútbol profesional. Hoy los reclamos en las calles de la zona rural de la nación peruana también grita para que gente como Beckham Romario no se olvide. No jugaba en los míticos estadios del planeta, pero veía en el fútbol la oportunidad de dejar algo positivo a sus hermanos pequeños y al resto de infantes conocidos.
Probablemente el destino del joven fallecido por un traumatismo craneoencefálico grave no terminaría en las canchas más prestigiosas de Perú, pero cada 11 de diciembre (día en que le asesinaron) debe gritarse en todos los espacios posibles sobre el legado de un futbolista/entrenador. Un tal Beckham Romario… que dejó un legado que va más allá del fútbol.