El amo y señor de la Champions League lo ha vuelto a hacer. La ronda de Cuartos de Final ha terminado con un conjunto merengue imponente que ha aprovechado su momento. Se midió ante el bicampeón londinense y pudo haberse llevado una goleada a favor para la ida. El Real Madrid le propinó un 2-0 al Chelsea en el Santiago Bernabéu y Lampard puede irse a casa con la tranquilidad de no haberse llevado más en contra.
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Real Madrid perdona a un Chelsea perdido
El comienzo del partido no da fe de lo que fue el desarrollo del mismo. Los ingleses empezaron el encuentro con un buen rendimiento, mostrando un interesante parado táctico. La posición de Enzo Fernández estaba dando la ventaja y sus delanteros movían de gran manera a la defensa rival. Sin embargo, la inestabilidad del Chelsea salió a flote ante un Real Madrid que cobra los errores.
Los de Carlo Ancelotti se adelantaron gracias a un rebote que dio Kepa ante un remate débil de Vinicius Junior. Karim Benzema estaba en el lugar adecuado y mandó el balón a guardar. La defensa de Lampard era insuficiente para el talento de los dos atacantes brasileños del Madrid. Ya en el segundo tiempo, la desatención defensiva de los azules permitió que Asensio prendiera mecha desde el pico del área y ampliara la ventaja.
Ahora bien, lo cierto es que el equipo merengue tuvo para anotar más goles y sentenciar la serie. El Chelsea, por su parte, puede irse a Londres con el consuelo de haberla sacado barata. Jugó gran parte del segundo tiempo con un jugador menos por la expulsión de Ben Chilwell. Además, varios de sus jugadores no dieron la talla, por cuestiones físicas, como Koulibaly, o por su capacidad de definición, como Joao Felix. El Real Madrid le perdonó la vida y tendrá que ir a Inglaterra el 18 de abril a repetir la dosis.