, uno de los chilenos más destacados en el fútbol australiano. En esta oportunidad, charlamos con Matías Toro Suazo, coterráneo de Emanuel, y tiene la chance de irse a jugar al fútbol europeo. Además de ello, contó su historia, cómo llegó al fútbol, cómo fue su infancia y su vida en el continente oceánico.
ENTREVISTA A MATÍAS TORO SUAZO, EL CHILENO QUE PODRÍA DAR EL SALTO A EUROPA
P: Creciste en el campamento Juan Pablo II de Lo Barnechea, uno de los lugares más humildes y vulnerables de la Región Metropolitana. ¿Cómo fue tu niñez? ¿Encontraste en el fútbol un sueño?
R: Mi infancia me marcó mucho, sobre todo viviendo en un campamento donde el 90% de las cosas que pasan ahí son malas y el otro 10% es fútbol con los amigos. No te miento. Hice cosas malas, cosas regulares y cosas buenas. Ahora que ya estoy grande me doy cuenta de todas las veces que con mis amigos pusimos nuestras vidas en riesgo por lo que hicimos. Pero la verdad es que si no vivía eso, yo no sería el hombre que soy ahora. Me gustó mi infancia. Siempre fue mi sueño jugar fútbol. No para hacer amigos, ni para ser famoso o vivir una vida de lujos. Simplemente porque amo el fútbol y en el equipo que juegue daré mi 100%.
P: Hace cuatro años estabas en la plantilla del Curacaví de la Tercera División de Chile. ¿Cómo era el estilo de juego? ¿Qué enseñanzas te quedaron de tu etapa allí?
R: Bueno, cada etapa de mi vida siempre me deja una enseñanza. De Curacaví recuerdo que el estilo en Tercera División era bien directo. Muy pocas veces veías que los equipos trataban de calmar el juego. Sí encuentras muchos jugadores muy habilidosos, pero las condiciones en Tercera División son muy diferentes a la Segunda o Primera división en Chile. Yo te hablo de hace cinco años atrás, no sé como estará ahora. Curacaví me enseñó mucho sobre todo humildad y trabajo duro. Me dio una buena base, ya que había mucho rose en Tercera y eso era bueno. Me dio mucho carácter y personalidad. Nuestros entrenamientos eran intensos y fue de gran ayuda para lograr el despliegue físico que tengo hoy en día. Disfrute mucho el jugar en Tercera y conocer a muchos compañeros que, hasta el día de hoy, tengo contacto.
P: Cuando te presentan la oportunidad de emigrar al fútbol australiano. ¿Qué es lo primero que se te pasó por la cabeza?
R: Lo primero que pensé fue “me voy”. No lo pensé dos veces. Lo hablé con mi familia y ellos me apoyaron desde el principio. Siempre, antes de tomar una decisión, me pregunto a mi mismo. “¿Qué es lo peor que puede pasar?”, “¿Tener que empezar de cero otra vez?” Y después me motivo solo. Vengo de la nada, salí de la nada y cada cosa que voy consiguiendo es un logro. Pero, lo que más me tranquiliza, es la fe que tengo en Dios. Se que donde vaya, él estará conmigo. Trabajo todos los días, se lo que puedo dar y no tengo miedo. Sea lo que sea, lo enfrentaré.
P: Hill United Brumbies FC es tu primer equipo en el ascenso australiano. ¿Notaste una diferencia importante con el fútbol del ascenso chileno que conocías?
R: Sí, es un gran club y tiene muy buenas personas. Siempre que necesitaba algo, ahí estaban ellos para ayudarme. Estoy muy agradecido de todo lo que hicieron por mi. Se nota la diferencia con el fútbol chileno sobre todo en lo físico. Creo que técnicamente en Chile son mejores, pero veo que la falta de técnica lo compensan con lo físico. Saben que es su fuerte y le sacan provecho a eso.
P: ¿Te costó adaptarte a la vida en Australia? ¿El idioma fue una traba?
R: SÍ, creo que siempre cuesta adaptarse cuando no estás en tu hogar con tu familia y más si es otro país. Respecto al idioma, la verdad que al no saberlo, era todo más complicado. Tenía que usar el traductor de Google para poder comunicarme. No tenía mucha comunicación con mis compañeros, con el técnico y con todo en general. Así que aprendí inglés y ahora puedo entender y hablar bien el idioma. Eso me hace feliz.
P: ¿Trabajabas y jugabas al fútbol en tus primeros pasos en el fútbol australiano?
R: Sí, trabajaba y después me iba a entrenar. Me sorprendió que hasta en Segunda División lo hacían y en Segunda te pagan bien. Te hablo por si sólo te dedicaras a jugar fútbol. Podrías vivir tranquilo, no es una vida de lujos, pero si tranquilo. El motivo es que el trabajo acá también es bien pagado y como te digo, físicamente les da para hacer las dos cosas. Entonces empecé hacer lo mismo. Otra cosa es que la vida acá es cara y si quieres juntar plata, bueno, no viene nada malo hacer las dos. Así es como ellos piensan. Yo pienso diferente. Quiero llegar más arriba en el fútbol y para eso, tengo que entrenar dos veces al día (todos los días) y eso es lo que hago.
P: Del Brumbies fichas por el SD Riaders. ¿Fue un paso importante en tu carrera?
R: No sé si un paso importante, pero si un cambio. En SD Riaders me encontré con más sudamericanos, empezando por el entrenador Nick Carl quien jugó en varios países y también la selección nacional de Australia. Lo mismo el asistente Sergio que ahora dirige en un equipo de la Primera División del fútbol femenino. Ya es otro fútbol el que jugábamos y otro estilo de juego que me favorecía mucho.
P: En 2019 logras el ascenso de la NPL 3 a la NPL 2 con el Riaders. ¿Qué lugar ocupa en tu carrera?
R: Fue un gran logro tanto personal como grupal. Esa temporada arrasamos con todos y ganamos todo. Fue un logro importante porque no es fácil conseguir un campeonato en el extranjero. Son muchas cosas que van pasando durante el transcurso de la temporada, ya sea dentro del fútbol como por fuera. Entonces, ganar ese campeonato, reflejó todo el esfuerzo que hice y sigo haciendo hasta hoy.
P: ¿Es cierta la chance de poder dar el salto al fútbol europeo en este mercado de pases?
R: SÍ, La verdad es qué hay una chance de jugar en Europa. Estamos en eso. Ya veremos qué pasa.
P: Para ir cerrando, si lo de Europa no se da, ¿volver a Sudamérica es una opción o preferís otro destino?
R: También he pensado en Sudamérica. Hay algo hablado también ahí con equipos de allí. No sé que pasará todavía y no he decidido nada. Solo Dios sabe lo que viene. Yo solo sigo entrenando hasta el cansancio todos los días para cuando llegue el día, estar listo y a disposición del equipo. Me siento súper bien mentalmente y físicamente. Estoy listo para lo que venga. Tuve una sobresaliente temporada, pero lo mejor está por venir.