Ya es un discurso muy utilizado en todos lados, pero es más real de lo que se pensaba, y es que sí es cierto que resultaría muy extraño el acatar el calendario formulado por la interrupción de la copa del mundo a finales de año. Sin embargo, Milán y el horror que han vivido desde el reinicio de fútbol en este 2023 es una pesadilla.
Simples y llanos números
Antes de que el mundo del fútbol partiera a la aventura catarí, el equipo de Stefano Pioli (ya algo alejado del Napoli) se posicionaba como un claro y fuerte candidato de la lucha por el titulo liguero. Tenían 33 unidades, mantenían la distancia con los ya mencionados sureños a ocho puntos y se despedían con confianza tras pegarle 2-1 a la Fiorentina. Pero todo cambió tras el mundial.
Regresando de las actividades con la selecciones nacionales, los rossoneri han jugado siete partidos y solamente ganaron el primero sobre Salernitana. Es decir, ya perdieron cinco juegos de Serie A, fueron eliminados tras perder en los octavos de final de Coppa Italia ante Torino… y los acérrimos rivales de la ciudad les golearon (0-3) en la final de la supercopa. Y hoy son quintos en la tabla general, por lo que jugarían Europa League.
El campeón se cae a pedazos
Y es que lo más impactante es que este artículo se trata del vigente monarca de la Serie A. Ese que desde la 2020-21 compitió hasta las instancias finales vs Inter para el scudetto de ese año y quien tras su ausencia desde siete temporadas atrás, en ese mismo 2021 regresaron a la máxima competición de clubes de Europa. Es decir, un equipo recuperado en todos los aspectos de años complicados en lo económico y en lo futbolístico, hoy vive una complicada situación.
Aquí es donde el frío análisis es requerido. Realmente en cuanto a plantel están debajo de Inter, Juventus y probablemente Nápoles. Además tampoco hicieron grandes fichajes. Siguieron en su propio negocio (más por necesidad) de traer jugadores de perfil bajo, a comparación de equipos como la Roma que trajeron a un bombazo como Paulo Dybala. Lo malo es que la mayoría (si no es que todos) de sus refuerzos son banca en estos momentos.
Plantel corto y mucha actividad
Si los refuerzos no funcionan, los que deben mantenerse en nivel top son los que los llevaron al título. Y parte importante de Milán y su horror es que tuvieron su bajón en lo individual y eso provocó una afectación evidente en el funcionamiento colectivo. Si a eso se le agregan las lesiones, como la clave de Mike Maignan que quedó fuera desde finales de septiembre, la situación se torna aún más complicada. Y es que Ciprian Tatarusanu (suplente de 36 años) no es un portero que sostenga el arco de un campeón, recibiendo ya 21 goles en 13 partidos donde entró como titular.
El terror milanés con Europa a la vista
Entonces si se indica que Milán y su horror no podrían tener más problemas, el próximo 14 de febrero encararán su duelo de octavos de final de la Champions League vs Tottenham. Dos semanas para tratar de alinear todo lo que está mal y sacar coraje para avanzar en un torneo que ganaron en siete oportunidades. Y además en Serie A, regresar a puestos de clasificación de este mismo torneo… de cara al año siguiente.
