“Crecí sacando leche de vaca en la granja y nunca planeé que eso sucediera”. Así es como Savinho, un niño de 20 años que salió del interior de Espírito Santo para ganarse el mundo con el fútbol, contó su historia en la presentación en el Manchester City.
PL Brasil habló con la madre del jugador, amigos y un extécnico para contar la trayectoria del joven prodigio. El niño que no se distanció de su origen a pesar de llegar a la Selección brasileña y a la principal liga del mundo.
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El humilde origen futbolístico de Savinho: de la granja a la cima de la Premier League
Sávio Moreira de Oliveira, más conocido como Savinho o simplemente Sávio, es natural de São Mateus, una ciudad de 126 mil habitantes. Doña Elinilma, su madre, crió al niño con sus propios padres, Mateus y Ana, en la granja, mientras trabajaba como operadora de caja en una panadería y luego cocinera en una cadena de supermercados durante casi seis años. “Mis padres nunca tuvieron las condiciones financieras para darle estudios y hoy es muy gratificante hablar de ellos porque Sávio los honra mucho como nieto, tiene un gran amor por ellos”.
En la misma conversación comparte detalles del origen del chico talentoso que llegó a uno de los mejores clubes del mundo a los 20 años. La vida era simple en la granja, donde sacaba leche y desmalezaba, e hizo que el niño aprendiera los valores importantes para el futuro. Y el apego a una experiencia sin grandes lujos continúa.
Incluso con dos años en Europa, Savinho no dejó las costumbres familiares y ni siquiera se entusiasma con viajar a grandes ciudades de mucha ostentación. En los períodos de descanso, realmente prefiere volver a la granja de sus abuelos y reconectarse con la vida en el campo.
En el rango de edad en el que está mi hijo, con el éxito que tiene, podría estar viajando, pero en todas las vacaciones va a la casa de mis padres, cuidando animales. Por mucho que no pueda montar a caballo, solo por estar conectado, pudiendo tocar una gallina o un perro, ya ha ganado el día, es su felicidad.
“Su pasión siempre ha sido la pelota”
Además de la pasión por los animales, Savinho desde pequeño tuvo una relación diferente con la pelota. Sin juguetes, carritos o incluso sin comer comida rápida. Solo quería la pelota para jugar. Ya a los cinco años mostraba que tenía talento. A los siete años, se mudó con su madre a la capital Vitória y comenzó en la pequeña Santa Cruz. El niño del campo tardó poco en cambiar la cancha de tierra por una de pasto, donde encontraría su mejor versión.
¿Cómo fue la llegada de Savinho al Atlético Mineiro?
Años después, vendría el tan soñado siguiente paso. Savinho hizo una excursión con su escuela al CT del Atlético-MG y su talento, aún crudo, despertó la atención de uno de los observadores del club en un amistoso de la categoría Sub-11. El promisorio futbolista brasileño fue asesorado por Juliano Rodrigues, empresario y propietario de SinteticBool, un club tradicional en la formación de atletas.
Le llamaron mucho la atención. Era gordito, no tenía el biotipo que tiene hoy. Varios clubes de Brasil se equivocan porque lo principal a evaluar es la calidad técnica, el regate, el dominio, el golpe en la pelota, dice Juliano Rodrigues.
Cuando sonó el teléfono de Dona Nilma, llegó la invitación para que su hijo permaneciera en Vespasiano, en el centro de entrenamiento del equipo minero. Las cosas empezaban a ponerse serias. Savinho tenía las maletas listas para jugar en un gran club brasileño. “Tenía una característica muy genial que era ser un zurdo que jugaba por el lado derecho, con muy buen acabado. Era similar a Robben, exBayern, comenta Rodrigues.
“Veo potencial en Sávio para competir por el mejor jugador del mundo. Juliano Rodrigues, agente de fútbol”
Nilma llevó a su hijo a Vespasiano y regresó a Vitória, ya que no podía mantenerse en Minas Gerais. Savinho estuvo bajo el cuidado de un amigo, Evandro, mientras vivía en una pensión. “Suelo decir que es uno de los peores dolores que hay, una madre estar lejos de su hijo, pero hoy puedo entender el propósito que Dios tenía en mi vida y en su vida. Fue necesario pasar por esto”, rememora.
Poco después, Nilma logró mudarse a Vespasiano y vivir con su hijo. “Donde vivíamos era como una favela, donde tenían varias bocas de humo. Era muy peligroso y exigí al club una conducción para llevarlo a casa ”, cuenta.
Savinho se destacó rápidamente en la base del Atlético Mineiro, apilando copas y llegando al juvenil de la selección brasileña. Fue campeón Sub-14 en 2018 y, al año siguiente, del Sub-15 y también del Sudamericano de la categoría con Brasil.
El impacto del prodigio fue notable. En la categoría Sub-15, los miembros de la comisión técnica ya hablaban de que Savinho empezaba a saltar etapas. La joya ya podía subir a niveles más desafiantes.
Tengo casi 16 años como entrenador en las categorías inferiores y, sin lugar a dudas, de los (jugadores) con los que trabajé, Sávio es el que más me llamó la atención por su precocidad, asertividad y capacidad para soportar la presión tan pronto. Ya sabía el peso que llevaba, lo que tenía que entregar cuando entraba para jugar por la expectativa que generaba, cuenta Filipe Mattos, actual entrenador del Sub-17 de Coritiba y exentrenador de las menores del Galo.
A pesar de tener una joya preciosa en la mano, el Atlético-MG no pudo sacar lo mejor del niño. El viaje al profesional, dentro del proyecto del equipo de transición, no fue bien planificado ni ejecutado, dijeron las personas involucradas en ese momento. PL Brasil descubrió que el Grupo City estaba atento a Savinho desde los tiempos de la Selección Sub-15. El primer contacto para una negociación ocurrió cuando Sávio estaba en el profesional del entonces campeón brasileño Atlético-MG, en 2021.
El Grupo City siempre miró a Savinho con potencial para llegar a Manchester. Ese era el objetivo. Pero el brasileño terminó en Troyes, club francés del mismo dueño de los Citizens, en una transacción que costó solo 6,5 millones de euros.
“Sávio es muy estudioso, estudia todo, idioma y todo lo demás. Llegó a casa y siguió investigando”. Nilma, sobre propuesta de Troyes a Savinho. El brasileño dejó el Galo en marzo de 2022, pero nunca jugó un partido por el Troyes. De inmediato, fue prestado al PSV, de los Países Bajos, donde jugó ocho partidos y dio dos asistencias.
La temporada siguiente, llegó el gran salto. Savinho fue cedido al Girona, club español del Grupo City, y el brasileño brilló con nueve goles y 10 asistencias en el campeonato doméstico con el club, mismo que logró una clasificación inédita para la Champions League.
Todo esto hizo que Savinho llegara a la Selección brasileña. El punta fue convocado para amistosos y para la Copa América, siendo titular en algunos partidos. Anotó una asistencia en un amistoso contra México e infló las redes en la goleada ante Paraguay por la fase de grupos.
Lloré mucho. Fue una sensación única. No sé qué significaba ese llanto para mí, pero verlo con esa camisa verde y amarilla cantando el himno nacional… no hay manera de que una madre que haya pasado por el Valle no derrame una lágrima. Solo le pido al Señor que quiero ver a mi hijo (en la Copa del Mundo) en 2026, eso es todo, cuenta Nilma.
Además de la Selección brasileña, Savinho también llegó al Manchester City. Los Citizens llegaron a un acuerdo con Troyes en febrero en una negociación que rondó los 40 millones de euros.
Los Ciudadanos entraron en la cabeza de Savinho años antes y de una manera muy curiosa. Más joven, cuando Savinho vivió en la casa de Lucão, preparador físico y fisioterapeuta de SintaticBool, a los dos les encantaba jugar a Fifa. El aficionado del City, Lucas siempre eligió al equipo para duelar con su amigo. La broma llevó a una predicción de Lucas: Savinho jugaría en el City en el futuro. Años después, dicho y hecho. “Siempre supe que Sávio jugaría en un gran club. La cuestión del City fue más por el hecho de que Sávio es un gran fan de Mahrez. Le empezó a gustar mucho el equipo a través de mí, pero también por Mahrez. Algunas características del juego lo recordaban mucho. Entonces, comencé a hacer esta asociación”, recordó.
PL Brasil descubrió que Borussia Dortmund, Juventus, Brighton, Everton y Bayer Leverkusen estaban detrás del brasileño en 2024, pero no pudieron vencer a la competencia del City. La idea inicial de los Citizens era comprarlo y luego prestarlo a algún equipo europeo, algo similar a lo que se hizo con Andrey Santos por el Chelsea. Pero el club inglés cambió de opinión tras la creciente evolución de Sávio.
Savinho ha estado en Manchester desde julio y, en su debut, ya ha levantado la Copa. Marcó uno de los goles de penal que le dio al City el trofeo de la Supercopa de Inglaterra (Community Shield) el pasado sábado contra el United en Wembley. En su nueva etapa, aquel niño que nació en Minas Gerais se separó nuevamente de su madre. Nilma prefirió quedarse en España, mientras que Savinho se fue a vivir con su esposa Anna Carolina. El niño de origen simple, enamorado de la vida en la granja, ahora tiene un gran escenario para mostrar todo su fútbol. “Creo que mi ficha aún no ha caído”, cuenta emocionada la madre del nuevo refuerzo del City. “Estoy revisando sus fotos todo el tiempo. Es algo que no puedo describir“.
