Después de años estando en Bundesliga, el Schalke había caído a la segunda división de Alemania en 2021. El equipo del Ruhr terminó de sellar un hundimiento doloroso. Sin embargo, su destino parecía mejorar cuando logró ascender el año pasado. Esta era su temporada de reencuentro con los mejores años de la institución. La temporada 22-23 era el momento para que los mineros se establecieran, nuevamente, en la primera división.
Dentro de sus filas, el juego del equipo era coordinado y dirigido por la figura de Rodrigo Zalazar. El mediocampista uruguayo era el encargado de la generación de fútbol y de dar el último pase en un equipo modesto. No obstante, el salto a la primera división fue complejo, tanto para el jugador como para el equipo. Y, en la última jornada, la escuadra azul selló su nueva caída a la segunda categoría del fútbol teutón.
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Schalke en Bundesliga: un descenso anunciado
El ascenso del Schalke a la Bundesliga dejaba una sola conclusión para el equipo del Ruhr: mantenerse iba a ser una tarea titánica. El salto entre la segunda y la primera división es un importante paso para los equipos que lo logran dar. Por ello, el equipo de Gelsenkirchen reforzó su alineación y se dispuso a conseguir el objetivo. Tal fue el trabajo que consiguió hacer el conjunto azul que llegó vivo y con opciones a la última jornada del torneo.
Este logro, puntualmente, es de reconocer, pues el equipo fue colista durante gran parte del torneo. Sin embargo, un repunte de último momento causó que saliera del fondo y estuviera ubicado por encima de su rendimiento en algunas de las jornadas finales.
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La última fecha le deparaba una complicada visita al RB Leipzig, que buscaba asegurar su cupo en competencias europeas. Como era de esperarse, los locales se impusieron y derrotaron a los mineros por 4-2. Su única esperanza era que el Stuttgart perdiera puntos en su partido. No obstante, el equipo consiguió empatar a un gol contra el Hoffenheim. Con eso, no había opción para la salvación.
El papel de Zalazar
El rol del uruguayo vivió diferentes momentos a lo largo de la temporada. Su inicio en la Bundesliga empezó por todo lo alto. El uruguayo era titular en el Schalke 04, era el futbolista más creativo de la medular del club. Sin embargo, sobre la octava jornada de la liga, Zalazar sufrió una dura lesión que lo apartó de las canchas. Casi por cuatro meses estuvo apartado del terreno por culpa de una fractura metatarsiana. Desde el mes de octubre hasta finales de enero, el Schalke no pudo contar con su creativo. Esto se tradujo en pasar de sumar seis puntos en 8 jornadas con el uruguayo, a sumar solamente 3 en 9 partidos.
Crucialmente, una vez regresó Rodrigo Zalazar, el Schalke tuvo un pequeño repunte en Bundesliga que le permitió soñar. Al regresar, el uruguayo ayudó a que su equipo acumulara ocho partidos sin perder: dos victorias y seis empates. A pesar de ello, el descenso fue inevitable.
En sumatoria, el jugador uruguayo disputó 22 partidos de Bundesliga, comenzando como titular en 15 de ellos. A nivel de aportación ofensiva, consiguió anotar un gol y asistir en seis oportunidades.
