El diario italianoLa Gazzetta dello Sport ha recopilado las peores transferencias de la Serie A. Comenzando desde la temporada 1999/2000. En esta lista sin duda alguna que hay muchos jugadores, y lógicamente de todas partes del mundo. Muchos que llegaron como posibles figuras y terminaron decepcionando. Nosotros detallaremos a continuación los peores fichajes latinos desde 1999 hasta la campaña 2002/2003.
Serie A: los peores fichajes latinos desde 1999 hasta 2002
1999/2000
Marcio Amoroso, superó a Batistuta pero en Parma no funcionó
Fuente: These Football Times
Llegó por 28 Millones de euros para pelear el título con el Parma. Venía de convertir 22 goles con Udinese la temporada anterior superando a un tal Gabriel Omar Batistuta. Con i crociati duró solo dos temporadas, hizo 18 goles en 52 partidos, se marchó al Borussia Dortmund.
Fabio Junior, llegó para eclipsar a Ronaldo y se apagó solo
Llegó a la Roma desde Cruzeiro para opacar la llegada de Ronaldo Nazario al Inter. Los romanos pagaron 13.80 Millones de euros. Duró solo una temporada, marcó cuatro tantos en 16 juegos, para peor la Lazio se consagró campeón en dicho año.
Fabricio Coloccini, no le dieron tiempo en el primer equipo
Milan le pagó 7 Millones y medio de euros a Boca por el pase del defensor central, este contaba solo con 17 años. Desde su llegada hasta 2004 fue cedido siempre, hasta que Carlo Ancelotti lo hizo jugar, fueron solo cinco veces, después volvió a salir de forma definitiva al Deportivo La Coruña.
2000/2001
Vampeta, uno de los peores fichajes latinos en la historia de la Serie A
Fuente: Fichajes.com
Considerado uno de los peores fichajes latinos en la historia del Inter y porque uno del club nerazurro. Duró seis meses. Pagaron una suma aproximada a los 15 Millones de euros al Corinthians. Parece que Marcos André Batista Santos era amigo de Ronaldo y este le dio el visto bueno al entrenador MarceloLippi. VanderleiLuxemburgo decía que tenía cosas de Dunga y otras de Rivelino, otros hablaban de un “Tardellimoderno“. Tanto cartel que terminó siendo un papelón, era lento y no le salía una. Jugó solo una vez.